La litiasis renal o cálculos renales es una condición médica originada por depósitos minerales en la orina concentrada. Estos se solidifican, lo que provoca la obstrucción de la uretra. Como consecuencia, el paciente experimenta dificultades en la micción, tales como ardor, sangrado y en ocasiones, vómitos.
En Urología Avanzada Puebla te explicamos con detalle cuál es el origen de los cálculos renales y cómo prevenirlos. También se especificará cuáles son los factores de riesgo y los cuidados necesarios.
¿Qué son los cálculos renales?
La litiasis renal está catalogada como una afección crónica, que se origina por diversas causas. Por lo general, estos se producen cuando existen problemas en la absorción de minerales en el metabolismo, alto nivel de acidez en la orina o sobresaturación debido al exceso de litógenos en el cuerpo. La deshidratación y el consumo excesivo de alimentos ricos en calcio también contribuyen al desarrollo de esta patología.
Por lo general, los cálculos están compuestos por sustancias habituales en la orina. Pueden tener diversas formas y tamaños y a veces pueden ser imperceptibles. Sin embargo, cuando el tamaño supera los 5 milímetros puede obstruir el uréter, ocasionando un dolor intenso en la parte baja de la espalda y en el abdomen.
De igual forma, su aparición está vinculada a diversos factores genéticos, como la obesidad o el exceso de calcio en la orina. Otras afecciones, como el hipoparatiroidismo, también representan un factor de riesgo, aunque en estos casos se trata más de una predisposición genética que a una consecuencia de la alimentación o el consumo deficiente de líquido.
Tipos de cálculos renales
Existen distintos tipos de cálculos renales, y según su composición, se dividen de la siguiente manera:
Compuestos por oxalato de calcio: son los más frecuentes. Se constituyen por compuestos orgánicos y gran cantidad de calcio, proveniente de alimentos lácteos, como el queso o la leche.
De ácido úrico: se forman por la descomposición de purinas, presentes en el organismo. Representan entre el 5 y 10% de casos de litiasis renal y es más frecuente en la población masculina. Por lo general, se debe al exceso de ácido úrico en la sangre.
De cistina: es muy poco común y corresponde solo al 1% de la población. Las personas que tienen esta patología también presentan un factor hereditario conocido como cistinuria.
Cálculos de estruvita: se forman debido a infecciones en el tracto urinario. Presentan pocos síntomas y pueden crecer muy rápidamente.
Por lo general, el principal factor de riesgo se produce por la ruptura en el equilibrio de la solubilidad. Luego del periodo de sobresaturación, se produce la etapa de cristalización. Como consecuencia, empieza el periodo de formación de núcleos de cristales. Cuando la litiasis sobrepasa los 0,5 centímetros de diámetro, propicia la aparición de hematuria
Cirugía de Litiasis Renal
El primer paso para tratar los cálculos renales es usar metodología no invasiva, como beber agua, consumir diuréticos o utilizar terapias médicas, como el uso de alfabloqueantes, que pueden evitar un tratamiento quirúrgico.
Si no funciona, dependiendo del tamaño se puede aplicar la litotripsia extracorpórea, que incluye el uso de ondas de choque para romper las piedras. Una vez terminado el procedimiento, los restos son expulsados a través de la orina. Por lo general, se trata de un procedimiento considerado como no invasivo. Otro procedimiento utilizado con mucha frecuencia es la litotripsia intracorpórea. Este procedimiento consiste en entrar de manera endoscopica hasta donde se encuentra el lito y fragmentarlo con rayo laser. Posteriormente se extraen los fragmentos.
Sin embargo, si se trata de litiasis que no puede tratarse de forma convencional, especialmente si se trata de cálculos grandes, es necesario optar por el procedimiento quirúrgico. En ese caso, se efectuará una nefrolitotomía percutánea para extraerlo. En ella se utiliza una sonda, la cual se introduce a través de una pequeña incisión lumbar. Este procedimiento requiere el uso de anestesia general y de antibióticos tras el post-operatorio.
Estas intervenciones deben ser realizadas por un especialista, por lo que si este es el caso, aconsejamos consultar a un urólogo de confianza.
Cuidados después de una Cirugía de Litiasis Renal
El alta es el proceso de recuperación, posterior a la intervención quirúrgica. En esta etapa, el paciente puede presentar náuseas y dolores después de la micción. Este proceso puede extenderse durante, al menos, 8 semanas. De igual forma, también existe la posibilidad de presentar hematomas en el lugar en el que se realizó la intervención.
El paciente debe incrementar el consumo de líquido a más de dos litros diarios y evitar cualquier actividad que ocasione movimientos bruscos. También deberá seguir una dieta, a fin de prevenir la formación de nuevos cálculos.
¿Cuánto cuesta una Cirugía de Litiasis Renal?
Para conocer el costo de la cirugía, el paciente deberá conocer su condición médica y ser evaluado por su urólogo de confianza. En Urología Avanzada Puebla siempre recomendamos al Dr. Sergio Julián García, quien determinará los diferentes exámenes que deben realizarse y el tipo de procedimiento. Una vez que se haga este tipo de valoración, el paciente recibirá un presupuesto, que dependerá en gran medida del equipo que se utilice durante la cirugía y la complejidad del caso.
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